¿Cómo...limpiarse con una toalla?

Hey, gûeros, qué pasa. ¿Cómo están?. ¿Me recuerdan?...siii. Soy Rui Cielos y este es tu espacio, Arta KK.

¿Han visto que linda es la primavera?. Está todo más iluminado, más verde, hay más colores. Es hermoso, ¿verdad?. ¡¡¡De pelos!!!.

Hoy quiero mostrarles otra forma de actuar si es que en el baño estás “dando a luz” y no tienes con qué limpiarte.

Arta KK ya te había recomendado usar la cortina de la ducha, sin embargo, muchas veces la misma cortina ya está usada, y bueno, no vale la pena arriesgarse. Entonces, hay otra alternativa, y me refiero a la toalla. Si, la misma con que te secas las manos. Esa con que te secas la boca una vez que te has lavado los dientes. Esa misma también te sirve para limpiarte el trasero. ¡¡¡Y es muy fácil!!!.

Lo primero que tienes que hacer es ubicar la toalla y luego asegurarte que sea lo suficientemente grande para poder esconder la mancha.

Cuando la tengas a la vista, ya puedes estar tranquilo. Entonces, ”Libera a Willy” con tranquilidad.

Si ya terminaste, empieza lo bueno.

Toma la toalla por el lado que llaman áspero, ese que es rugoso y que tiene pelusitas. Enróllatelo en la mano y cuando te lo pases por el poto, trata de presionar fuerte, lo que más puedas, para que de una pasada quede todo limpio y ni tarzanes queden como mudos testigos de tu acto.

Si ya te la pasaste, pues déjala a un lado y levántate de una vez.

Toma la toalla cuélgala en el mismo tubo donde la encontraste pero con el autógrafo hacia adentro, es decir, que las dos caras de la parte que llaman áspera, queden mirándose. Bueno, tú entiendes…jejeje.

¿Te quedó claro?. Entonces, anda a la casa de algún amigo y prueba en su baño. Será muy divertido, te lo aseguro.

Adiós...